Sorpresas y paisajes

Fotografías de lo que veo por esos campos…

Los Trinacria

Posted by Pele Camacho en 13 julio, 2014

Los Trinacria tienen algo en común con los Soprano y los Corleone: sus orígenes sicilianos, por lo menos.

Hollywood y la interné han difundido ampliamente, hasta un nivel exotérico, las historias de las dos últimas familias, pero no ha ocurrido lo mismo con la primera, aunque su nombre toponímico es tan antiguo como las culturas mediterráneas en las que surgió lo de Trinacria que, según dicen, significa “con tres esquinas o picos”, como algo triangular. Eso fue así porque, ya en aquellos tiempos remotos de hace más de veinte siglos, sin satélites ni instrumentos sofisticados, los tres cabos o abombamientos en la geografía de Sicilia fueron detectados por los navegantes de entonces: el situado al sur no tiene ciudades o parajes relevantes, pero sí los tienen el occidental, donde está Marsala -“Scallopini Marsala”-  y el oriental de Mesina, que da nombre al estrecho que la separa de Calabria, la punta de la peninsular bota italiana donde residen los calabreses, algunos de los cuales compiten con los sucesores de Sopranos y Corleones.

IMGP9771_1200_1047KNUn capo di capi: Un macho en plenas facultades

(Picar en las imágenes para verlas con más resolución)

Los trinacrias de esta entrada -a nivel odonatológico Orthetrum trinacria, (Selys, 1841)– fueron identificados por primera vez en Sicilia y de ahí les cayó el nombre que, aparte de biensonante, les da matices esotéricos más o menos creíbles. Sus tamaños destacan por encima de la media libelulera; son superestilizados, con un abdomen delgado y  largo, y unas alas que, por el contrario, son largas y relativamente anchas, lo que les confiere una capacidad de vuelo sobresaliente. En cuanto a su aspecto, sobre todo el de los machos, y el color azul oscuro de todo su cuerpo, les da un matiz algo siniestro, como de matones o de “pistoleros libeluleros”…

IMGP9744_1200_936KNUna mamma:  «Se adivina con mirarla que no la han querido bien… » (Tango porteño)

Las hembras, como en la mayoría de las especies de libelúlidos, permanecen en un “segundo plano”, apartadas de las exhibiciones de vuelo de sus machos. Son más difíciles de ver -y no digamos de fotografiar- porque apenas se las ve si no es en los momentos de cópulas o sus “desenganches”; son más claritas, tienen manchas amarillentas en sus libreas y sus ojos más glaucos, aunque no menos bellos que los impresionantes ojos azules de los machos.

IMGP8132_1200_797KN Il ragazzo:  Jovencito mostrando aún parte de sus colores marfileños

Como en casi todos los odonatos jovencitos, hembras y machos de la misma especie se parecen, dejando aparte los detalles de las genitalias secundarias -los apéndices anales– que marcan diferencias desde sus emergencias.

Y retomando aquello de los matices esotéricos de las Trinacrias, se podría empezar por el símbolo o icono –la Trinacria– que figura en la actual bandera de Sicilia: una cabeza femenina que parece ocultar un cuerpo del que surgen tres piernas que apuntan un triángulo superpuesto a los triángulos rojo y gualda de la bandera. Indudablemente, el icono tiene “gancho”, porque también figura en la bandera de la isla de Man, pero con menos gracia que en la siciliana, “como-no podía-ser-de-otra-manera”

IMGP9821_1200_1024KNOcchi sbarrati di capo:  ojos descomunales de un jefe. De su visión dependen muchas cosas…

Más allá en la simbología relacionada a “trinacrias” y triángulos, están los “ojos que todo lo ven”, donde se mezclan dioses, mitologías y sectas que la literatura esotérica ha utilizado con no poco éxito comercial, aunque con dudosa veracidad, pues por y para eso es esotérica.

IMGP9750_1200_896KNOjos glaucos de una mamma:  «Ojos claros, serenos, si de un dulce mirar…  » (Gutierre de Cetina)

Yo no sé cuánto, cómo y qué ven los ojos de los trinacria, pero cuando veo sus colores y sus facetas,  se me quedan cortas las ópticas con las que yo los miro y los guardo para recuerdo.

3 respuestas to “Los Trinacria”

  1. Es espectacular Pele, y elegante. Visten bien estos italianos… Magníficas fotos. Espero que el verano haya ido bien. Un abrazo.

    • Sí lo son, sí…
      Me han comentado que por esa isla triangular la vestimenta es casi un uniforme que tanto vale para un bautizo, una boda o un entierro: traje negro, camisa blanca, gafas negras… y mirada seria. Vamos, que lo de «trinacria» le viene a este Orthetrum como hecho a medida.
      Salvo unos días en Soria, con fresco ambiente y cálida compañía, por aquí abajo con demasiado «ambiente» y temperaturas que los guiris disfrutan con desatino y enrojecimientos. Yo se lo dejo todo, todo, a ellos y ellas.
      Un abrazo y mejor otoño

      • Soria, buen refugio, sí señor. Algunas veces voy por allí, hay mucho que ver en toda la provincia. Además, ese lomo y el huevo frito, con ese torrezno, allí en Valonsadero… No sigo hablando, me emociono pensando en el torrezno…

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